No considero que este hotel tenga una buena relaciĂłn calidad-precio, ya que ni disponen de recogida de habitaciĂłn, si la habitaciĂłn no tiene balcĂłn no hay sitio disponible para colgar ni las toallas del baño, y como no las cambias al segundo dĂa te tienes que secar con las toallas mojadas. Nos tocĂł una habitaciĂłn para tres personas con una cama de matrimonio que no llegaba ni al tamaño "standard" de 135cm, ademĂĄs de una cama supletoria. El desayuno muy triste, un cafĂ© y dos tostadas con mermelada, y si preguntas por zumo te dan de tetrabrik y te lo cobran aparte, ademĂĄs de tardar un montĂłn en servirlo. La entrada al lugar no estĂĄ bien señalizada y no hay cartel luminoso, por lo que si llegas de noche te pasas la entrada. El hotel estĂĄ situado en mitad de la carretera en un lugar con un acceso peligroso (carretera de curvas) y la playa no es accesible, ademĂĄs de necesitar coche para llegar a Altea pueblo o a cualquier otro sitio, a no ser que quieras andar por el arcĂ©n de la carretera.